Debido a la influencia del Manifiesto de Córdoba, de forma temprana en el Ecuador se plantea el cogobierno universitario y es decretado por el congreso. “En 1925, con la Revolución Juliana se crea una Ley de Educación Superior en la cual se reconoce la autonomía universitaria.” (Celi, 2014: 26). En 1935 los estudiantes se toman la casona universitaria exigiendo el respeto a la autonomía universitaria debido a que, Velasco Ibarra clausuro la UCE. Años después el movimiento universitario surge a raíz de la invasión del Perú, por la humillante derrota militar de 1941 y la secesión de territorio por parte del gobierno liberal de Luis Alberto Arroyo del Río.
Los estudiantes universitarios desempeñan un rol importante en la revolución del 28 de mayo de 1944, también llamado La Gloriosa que derroca a Arroyo del Río. Es tal la participación del movimiento estudiantil al punto de que obtiene una representación en la Constituyente de 1944-1945. Y en 1944 se crea la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), producto de la I Conferencia Nacional de Estudiantes (06 de diciembre de 1943), impulsada principalmente por la Juventud Comunista Ecuatoriana y la Juventud Socialista Ecuatoriana, más otras fuerzas que para la época cohesionaron en distintas consigas. Los principios que inspiraron a los representantes estudiantiles reunidos en la Universidad de Guayaquil fueron el antiimperialismo, el antifascismo y la acción antioligárquica.